México.- El molusco contagioso es una enfermedad viral, transmisible y autoinoculable de la piel que afecta principalmente a niños menores de 10 años. Su aparición es benigna y suele curarse sola.
La enfermedad se caracteriza por protuberancias redondas de entre tres a seis milímetros y del color de la piel o rosas que no causan ninguna molestia, señala la Fundación Mexicana para la Dermatología.
Las lesiones, que pueden manifestarse en los próximos 14 o 50 días posteriores a su transmisión, suelen desaparecer por sí solas luego de seis a nueves meses, dejando una mancha hiperpigmentada sobre la piel.
En los niños las protuberancias se localizan en cualquier parte del cuerpo, especialmente en la cara, cuello, axila y parte superior de las manos, señala la Clínica Mayo en su página web.
En ellos la transmisión ocurre a través del contacto piel a piel con personas contagiadas por un virus de la familia Poxvirus o por el uso compartido de objetos contaminados, como toallas.
Algunas de las posibles complicaciones que pueden ocurrir con el molusco contagioso es que las protuberancias y la piel a su alrededor se enrojezca e inflame. Esto sucede, generalmente, como una respuesta inmunitaria a la infección.
Si bien el molusco contagioso no implica ningún peligro a la salud, la Clínica Mayo exhorta a lavarse las manos y evitar tocar las protuberancias debido a que el virus puede expanderse a otras áreas del cuerpo.
Asimismo, pide no compartir objetos personales como ropa, toallas o cepillos de pelo, y cubrir las protuberancias con ropa cuando se esté cerca de otras personas, lo que evitar el contacto directo con la piel.
Con información de El Botiquín